- Los Agentes trataron de calmar inicialmente al varón agresivos, invitándolo a abandonar el establecimiento donde se hallaba, si bien continuó increpando a viandantes en la calle y terminó tratando de agredir a los actuantes.
- Durante el traslado a dependencias policiales el detenido continuó amenazando a los actuantes y rompiendo una ventanilla del vehículo policial.
El día 1 de diciembre, sobre las 00:30, una patrulla de la Brigada Nocturna se dirigió a un establecimiento público en el que un varón agresivo había comenzado a increpar a los clientes.
A la llegada de los Agentes se confirmó su presencia y el evidente estado de alteración del implicado, tratando de calmarlo e identificarlo, volviendo los insultos y actitud hostil hacia los actuantes. Advertido inicialmente de las consecuencias legales de su negativa, accedió finalmente a colaborar, siendo invitado a abandonar el local para evitar nuevos incidentes.
Una vez en la calle, a pocos metros del punto inicial de la actuación, el varón de 32 años, comenzó a insultar a los viandantes con los que se cruzaba. Por tales hechos volvió a ser advertido, pasando a amenazar directamente a los Agentes para pasar a continuación a intentar agredirlos. Finalmente, la patrulla redujo al implicado, procediendo a su detención y traslado a centro de salud y dependencias policiales.
Durante el traslado, lejos de deponer su actitud, continuó profiriendo graves amenazas y lanzar patadas contra la mampara y ventanilla del vehículo policial, ocasionando su rotura y lesiones a dos de los Agentes actuantes.